Caracas, 13.12.1888/Caracas, 21.4.1970
JARRO MOCHO ANGEL CHIRINOS.mp3 A
JARRO MOCHO ANGEL CHIRINOS.mp3 B
Una Duda
https://youtu.be/k3zduN3bdSU
El Atavesado
https://youtu.be/OWTsClcxep0
Federico Vollmer fue un
destacado músico, empresario y urbanista venezolano, hijo de Gustavo Vollmer Rivas y Ana Gertrudis Boulton Rojas, sobrina de
Arístides Rojas. Federico Vollmer fue
el primer Vollmer nacido en
Venezuela. Nació en Caracas el 13 de diciembre de 1888 y murió en esta capital el 21 de abril de 1970.
Estaba emparentado con
la familia de El Libertador Simón Bolívar, pues su
padre, Gustavo Julio, originario de Hamburgo, se casó con Francisca Ribas y Palacios -única hija sobreviviente de Antonio José Ribas y Herrera y de Ignacia Palacios y Blanco-. En
consecuencia, Francisca “Panchita” era sobrina del General José Félix Ribas y
Herrera “Vencedor de los Tiranos en La Victoria”, y prima hermana de El Libertador Simón Bolívar y Palacios.
En 1894, tras la muerte
de su madre, él y su hermano Leopoldo fueron a vivir con su abuela materna, Dolores Rojas de Boulton, hasta 1904
cuando viajó a Suiza a estudiar bachillerato en el colegio de La Villa, en
Ouchy, culminándolos en Lübeck, Alemania.
En Cirencester,
Inglaterra, estudió en el Royal
Agriculture College. En 1914, al estallar la Primera Guerra Mundial, debió
abandonar sus estudios en Inglaterra y residenciarse en España hasta principios
del año 1915, cuando regresó a Venezuela, estableciéndose en la hacienda El Palmar, en La Victoria (estado
Aragua), donde se dedicó al desarrollo agrícola de las propiedades de su padre.
En 1922 contrajo
matrimonio con Luisa Mercedes Herrera
Uslar, con quien tuvo 3 hijos. A mediados de los años 20's se trasladó a
Caracas para encargarse de la hacienda Montalbán. Con su hermano Alfredo, se
asoció con Julio Blanco Ustáriz y Alfredo y Oscar Augusto Machado con la
finalidad de crear una empresa constructora, con la cual se urbanizó su
hacienda caraqueña de San Bernardino en 1939; para lo cual contrataron al
urbanista francés Maurice Rotival, quien diseñó lo que hoy día se conoce como
la urbanización San Bernardino.
Federico Vollmer fue también
accionista y miembro fundador de distintas empresas, tales como la Electricidad de Caracas, la Cervecería
El Águila, llamada luego Cervecería
Caracas, y Cauchos General (1939). Otras empresas
en las que también fue miembro fundador entre las décadas de 1940 y 1950,
fueron Venezolana de Cementos
(VENCEMOS), Venezolana de Papel
(Venepal), Banco Mercantil y Seguros La Seguridad.
En 1963 donó 31
hectáreas de su Hacienda Montalbán para el desarrollo y construcción en la
urbanización Montalbán, de la nueva sede la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), así como la casa de la mencionada
hacienda a la Conferencia Episcopal Venezolana. En 1965 creó la Fundación
Vollmer, con el fin de apoyar obras benéficas, científicas, culturales y
educativas. También participó en la creación de la Fundación de la Vivienda Popular (FVP) y el Dividendo Voluntario para la Comunidad (DVC).
Federico Vollmer el músico
Federico Vollmer fue un
músico autodidacta, cuyas composiciones reflejan fielmente el mundo musical
venezolano de mediados del siglo XIX. Ciertas características costumbristas llaman la
atención en sus composiciones, las cuales abarcan toda la gama de expresiones
musicales de su tiempo. Fue un fiel exponente de polkas, mazurcas, danzas,
valses e impromptus. En sus danzas se observan rasgos de lo que serían más tarde el
merengue, la guasa y algunas gaitas.
Dedicó sus piezas a
compositores, artistas y otras amistades, ejemplo de lo cual es el caso de “El Reloj
de la Catedral”, dedicado a Arturo Michelena, “Tu y yo”, a la Srta. M.R. Una característica de sus obras
musicales está en los títulos graciosos que las identificaban. Así por ejemplo,
“Sí,
sí, ya tú me lo dijiste…”, “El
Porfiado”, “¿Qué si queréis cacao?”, La Simplona
Como ocurre con los
grandes compositores, cuyas obras, por su popularidad, pasan inmediatamente al colectivo,
que las toma como suyas y se desdibuja el nombre del autor, sus composiciones
pasaron rápidamente de los elegantes salones a plazas caraqueñas como piezas
obligadas en los repertorios y bandas marciales que amenizaban fiestas y
retretas, en rollos de pianola y en los primeros discos fonográficos.
Un ejemplo es su vals “Jarro
Mocho” (compuesto por Vollmer en 1876,) pieza que inmediatamente se hizo muy popular y, al
igual que otras de sus obras, al incorporarse en el torrente de la música
popular venezolana, se independizó del compositor y adquirió su propio ritmo.
(*)
A finales de 1897 Federico G. Vollmer editó parte de su
música en un volumen titulado “Lira venezolana”, cuyo bellísimo frontispicio (obra de su amigo Arturo Michelena) ilustra la carátula de este disco. Formado
culturalmente en Europa, la obra musical de Vollmer muestra por igual influencia
de los grandes clásicos europeos y de los arpistas populares de su tierra
venezolana.
113 años después, la Alberto Vollmer Foundation editó Lira
Venezolana, con la producción general de Sofía Vollmer de Maduro y la
interpretación de Monique Duphil al
piano, en un nuevo formato, conservando la carátula original. Este trabajo fue
reeditado en el 2010 y puede ser adquirido a través del Centro de Documentación de la Fundación Alberto Vollmer.
Archivo fotogtáfico Vollmer
“Gran parte de las
fotografías de esta Colección provienen del siglo pasado tratándose mayormente
de retratos en formato de tarjetas de visita y de gabinete bajo la técnica de
la albumina. La tarjeta de visita llamada también carta de visita es la traducción
del francés “Cartes de Visite”, un retrato fotográfico de 9 x 6 centímetros de
tamaño que circuló desde 1854, ganando rápidamente popularidad con el público” (fundavollmer.com).
Federico Vollmer
·
Referencias
Con información de:
* Alberto Vollmer Foundation
* Fundación Santa Teresa
* Fundación Santa Teresa