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martes, 19 de julio de 2011

Tradiciones / Folklore Espiritual de Venezuela / EL NAZARENO



Una de las devociones de Semana Santa que más convoca a la feligresía venezolana es la del Santo Nazareno, una tradición que en Caracas se conoce desde el siglo dieciséis (años 1500). Aunque la veneración al Nazareno de San Pablo nació en Caracas, el fervor religioso hacia esta figura se extendió a los más remotos caseríos, pueblos y ciudades de Venezuela.
Hay réplicas de la imagen de Jesús Nazareno en Barquisimeto, capital del estado Lara; y en la población apureña de Achaguas (vocablo indígena), donde se venera con gran fervor la figura de madera donada por el general José Antonio Páez, en pago de una promesa que le hizo al Nazareno durante la guerra de independencia.
Anualmente, durante los días de Semana Santa, acuden a esta población llanera miles y miles de devotos a venerar la imagen del Santo Nazareno de Achaguas y pagar las promesas por los milagros concedidos a sus fieles.
En Caracas, la devoción al Nazareno comenzó en 1597 cuando se produjo en esta capital una gran epidemia de la peste del vómito negro que diezmaba a los caraqueños. La gente moría sin que ningún remedio lograra aliviar aquella dolencia.
El Miércoles Santo de 1597, desesperados, los fieles capitalinos sacaron en procesión al Nazareno de la Iglesia de San Pablo y al pasar por la esquina de Miracielos la Cruz se enredó en las ramas de un limonero que sobresalía por encima de la tapia de la casa donde estaba sembrado. El limonero desparramó generoso sus frutos por el suelo y la feligresía interpretó aquello como un mensaje divino.
Terminada la procesión, los caraqueños corrieron a sus casas y prepararon jugo de limón, y aquel jugo generosamente ingerido, que para la feligresía fue ni más ni menos, que un remedio bendito, curó el vómito negro a la población con casas de techos rojos.
Este acontecimiento inspiró al eximio poeta cumanés, Andrés Eloy Blanco, para escribir su poema El Limonero del Señor, testimonio de aquel milagro. Este poema comienza así: “En la esquina de Miracielos agoniza la tradición/¿qué mano avara cortaría el limonero del señor?...

El Nazareno de Achaguas

Devoción similar se le rinde al Nazareno de Achaguas, en el estado Apure, una talla de cedro hecha en España, que donó el general José Antonio Páez en 1835, en pago de la promesa que le hizo en 1821. Eran los tiempos de la guerra de independencia, de Las Queseras del Medio, Mucuritas, El Yagual, Carabobo y tantas otras batallas libradas en Apure y en otras partes del territorio venezolano. El taita Páez, como solían decirle sus hombres, era un católico convencido (además de devoto de las ánimas benditas) y prometió al Nazareno que si regresaba triunfante de la batalla de Carabobo le regalaría una imagen.
“El Centauro de los Llanos” cumplió su promesa y esa talla de madera es la que se venera en Achaguas desde 1835. La imagen sobrevivió a un incendio de la iglesia. Durante la Semana Santa en Santa Bárbara de la Isla de los Achaguas, nombre original con el cual bautizó a esta población su fundador en 1774, el fraile Alonso de Castro; se realizan actos religiosos de gran fervor en honor al milagroso Nazareno.
Es tradición que los fieles apureños y los turistas llegados de todas partes de Venezuela y de otros países vistan túnicas moradas y acuden a la iglesia de Achaguas a pagar sus promesas e implorar favores al Nazareno. Junto con las actividades religiosas, se celebran las Fiestas de Achaguas, con conjuntos y cantantes nativos de Apure y de otros estados venezolanos, e, incluso, de la vecina Colombia.

El Cristo del Buen Viaje

En distintas partes de Venezuela se venera la imagen de Cristo Crucificado y, de forma paralela a los actos religiosos de la Semana Santa, en los estados Trujillo, Mérida, Monagas y Anzoátegui se hacen representaciones de la pasión, muerte y resurrección de Jesús.
En Pampatar, vocablo Guaiquerí que significa “Casa del Sol”, el Santo Cristo del Buen Viaje es el segundo Santo más venerado en la isla de Margarita. Se le conoce también el Cristo de Pampatar y Cristo del Pescador. Este Cristo no venía destinado a Venezuela, pero él decidió quedarse en Pampatar, quizás por la forma especial de ser que tienen los ñeros y las bellezas de la región insular.
Cuenta la leyenda que la imagen iba con destino a Santo Domingo y traía un viaje tranquilo, pero al entrar en aguas del Caribe mar se desató sin más una gran tormenta, con vientos huracanados, terrible mal tiempo, truenos, rayos y tempestad.
El capitán del barco decidió echar anclas frente a Pampatar mientras pasaba la tormenta. De forma prodigiosa cesó el mal tiempo, la mar se aquietó y volvió la calma. Tan pronto como el capitán de barco intentó levar anclas, regresaron los nubarrones, truenos, rayos y centellas. Cada vez que el barco intentaba zarpar volvían los vientos huracanados y la tormenta. El capitán decidió entonces dejar la imagen del Santo Cristo en la iglesia de Pampatar. Sólo después de esta decisión, que indicaba que se había captado el mensaje de la imagen sagrada, el barco pudo seguir su viaje sin más contratiempos, de la misma forma apacible que traía al zarpar de Santo Domingo.
Muchas de las distintas manifestaciones y tradiciones religiosas que se dan en Venezuela son herencia de nuestro origen español, segundo aporte al mestizaje criollo (el primero es el indio y el tercero es el negro). De España, además de la lengua y tradiciones que luego aquí venezolanizamos, también heredamos su culto a la extensa nomenclatura mariano-religiosa.
También para estos temas la musa les sale fácil a los compositores venezolanos, quienes cada día aumentan la gran cantidad de temas dedicados a vírgenes, santos, milagros y hechos solo explicables por la intervención divina. De esa larga lista, aquí les mencionamos algunos:
1.- EL LIMONERO DEL SEÑOR ANDRES ELOY BLANCO
2.- SEMANA SANTA EN ACHAGUAS (ENEAS PERDOMO)
3.- “EL CRISTO DE LA SABANA”… ENEAS PERDOMO/ CONJUNTO DE RIGOBERTO VALERA
4.- CRISTO DEL PESCADOR (JESUS AVILA) CONJUNTO CUERDAS ESPARTANA
5.- EL GUIA (Autor Edgar Alexander/ Interprete José Luis Rodríguez
6.- YO CREO EN DIOS (AUTOR: HUGO BLANCO / INTERPRETAN: 4 MONEDAS) ESTA MELODIA GANO EL SEGUNDO FESTIVAL INTERNACIONAL DE LA CANCION DE ESPAÑA EN 1969
7.- EL GUIA (AUTOR : EDGAR ALEXANDER, ES INTEGRANTE DEL GRUPO AZUAR, CACAO Y LECHE”/CANTA JOSE
LUIS RODRIGUEZ
8.- EL HOMBRE DE LA CIMA

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