Federico Villena Antonio Lauro Manuel Enrique Pérez Díaz
¡Adiós! A Ocumare
http://youtu.be/WbXZ_Man-cA
Ángel María Landaeta
Arreglos de Antonio Lauro
Serenata
www.youtube.com/watch?v=FBpj0xJ8R8M
Autor: Manuel Enrique Pérez Díaz
Canta: tenor David Hidalgo
El VALS
es un ritmo venezolano cultivado desde los tiempos coloniales por músicos
destacados en todo el país, pero cuya mayor difusión y ejecución se da en la
región andina y el centro occidente del país. De hecho, es uno de los ritmos
que identifican a la música de los Andes. El vals se deriva de un baile popular
alemán conocido como LAENDLER.
Los orígenes y la trayectoria de este ritmo venezolano cultivado fundamenalmente en los Andes se conocen debido a la labor investigativa de cuatro grandes musicólogos criollos -Salvador Llamozas, en 1883, Juan Bautista Plaza, en 1939, José Antonio Calcaño, en 1958 y José Peñín, en 1998-, quienes afincaron sus investigaciones en el vals como expresión musical y establecieron las raíces del vals llegado a Venezuela donde adquirió características propias.
Del campo a los grandes salones
De origen
campesino, el vals se coló a los grandes salones de las cortes europeas, donde
los cortesanos lo bailaron, lo disfrutaron y lo hicieron suyo. La sublime
cadencia del vals europeo regresó pronto al alma popular de los venezolanos,
convirtiéndose en una de las formas musicales que desde entones representó el
criollismo en el arte nacional venezolano.
La guitarra, el
tiple, el arpa,
el cuatro, el piano y posteriormente el clarinete, son los instrumentos típicos
para la interpretación del valse, aunque también se utilizan los instrumentos
tradicionales de cada región. En la región andina también se usan el violín, la bandola y la mandolina como instrumento solista.
Junto a
estos instrumentos solistas, acompañan también la guitarra, triple y cuatro. En Lara se ejecuta con violín, mandolina,
cuatro y guitarra.
La
melodía, generalmente en ocho compases, es entrecortada e insinuante en el vals
venezolano, que al nacionalizarse dejó atrás la influencia europea,
especialmente con la métrica, y privilegia los silencios y compases “de forma
graciosa y saltarina”, explican los entendidos en la materia.
Esta
influencia del valse llegó a los serenateros y compositores románticos, quienes
divulgaron ampliamente el vals-canción. En los Andes venezolanos se creó el
pasillo, forma de valse andino, con marcada presencia en las regiones
colombianas contiguas.
Este
ritmo se posicionó en el sentimiento popular venezolano a partir de 1850, en
los años posteriores a la gesta emancipadora. El valse venezolano adquirió su
carta de nacionalidad venezolana en la plaza pública y en la calle de
ventanales y celosías abiertas a los serenateros, recorriendo con su elegancia
melódica las principales ciudades, refieren los musicólogos.
El Diablo Suelto afamado
El Diablo Suelto
Autor: Heraclio Fernández
Interpreta Orquesta Típica Nacional
En las
retretas de las plazas públicas de la ciudad y de los pueblos y pueblitos
provincianos los parroquianos de aquellos años lejanos aprendieron, bailaron y
cantaron los valses más representativos del folklore criollo.
Estas
andanzas populares determinaron que el valse se alejara del modo vienés de
marcar tres tiempos bien pulsados, derivando
en la síncopa criolla (una blanca
seguida de una negra), emparentándose en forma definitiva con el joropo
citadino, con el pasaje llanero, con el golpe central de los Valles del Tuy y
de Aragua y con los golpes larenses, refieren los músicos de escuela.
Entre los
valses venezolanos más representativos y el más conocido está El Diablo
Suelto, compuesto por el músico marabino Heraclio Fernández (1851-1886). Esta pieza es un vals
con ritmo de joropo, que alcanzó gran notoriedad como la expresión más genuina
de la tradición musical de Venezuela.
El músico
y periodista Heraclio Fernández
dedicó este vals a sus compañeros del periódico El Diablo Suelto (encartada a la edición del 19 de
marzo de 1878, apareció impresa la partitura para piano de este vals representativo).
Esta
partitura se puede leer en el libro La música en la vida y lucha del pueblo venezolano,
1980, escrito por Alirio Díaz, quien la rescató del olvido en una tienda de
libros viejos en Caracas.
(http://tr3ecv.blogspot.com/2012/10/vals-venezolano.html)
(http://tr3ecv.blogspot.com/2012/10/vals-venezolano.html)
Valses genuinamente venezolanos
Las investigaciones que hicieron sucesivamente Salvador
Llamozas, Juan Bautista
Plaza, José Antonio Calcaño y José Peñín, dejaron en claro, entre otros aspectos, que el Vals tuvo sus inicios en el siglo XVIII, aunque su auge como baile popular de salón se acentuó a partir de la mitad del siglo XIX, cuando se convirtió en el protagonista de los bailes.
El vals que se bailó en aquellos grandes salones era una melodía de dos partes, con un compás de 3/4 y su característica Sincopa Criolla (una blanca seguida de una negra). El uso del piano en el vals era sobre todo protagónico en los llamados vals de salón", donde se desarrollaba un vals de 2 partes, estructura que sirvió de inspiración para guitarristas, como Antonio Lauro y sus famosos valses adaptados a la guitarra.
El uso del piano en el vals era protagónico, sobre todo en los llamados “vals de salón”, donde se desarrollaba un vals de dos partes, estructura que sirvió de inspiración para guitarristas, como Antonio Lauro y sus famosos valses adaptados a la guitarra.
La estructura musical característica de los valses populares consta de tres partes. En la tradición popular se puede encontrar el vals en muchos bailes y manifestaciones folklóricas, como el joropo y el tamunangue, entre otros, lo cual confirma que es un baile y un ritmo nacional.
Valses famosos
“Adios a Ocumare” - Cantares Venezuelan Choir http://youtu.be/oQ2G1vujmV8
Referencias
* Manuel Enrique Pérez Díaz integró el Trío Los Cantores del Trópico, junto con Raúl Borges, Antonio Lauro y Marco Tulio Maristany. Este trío de alta factura musical realizó giras por toda América Latina. Pérez Díaz compuso las piezas para guitarra La Serenata, La Negra Espuma y Guasa. Dictó cátedra en la Escuela de Música José Ángel Lamas. Tuvo gran éxito como instrumentista.
El vals que se bailó en aquellos grandes salones era una melodía de dos partes, con un compás de 3/4 y su característica Sincopa Criolla (una blanca seguida de una negra). El uso del piano en el vals era sobre todo protagónico en los llamados vals de salón", donde se desarrollaba un vals de 2 partes, estructura que sirvió de inspiración para guitarristas, como Antonio Lauro y sus famosos valses adaptados a la guitarra.
El uso del piano en el vals era protagónico, sobre todo en los llamados “vals de salón”, donde se desarrollaba un vals de dos partes, estructura que sirvió de inspiración para guitarristas, como Antonio Lauro y sus famosos valses adaptados a la guitarra.
La estructura musical característica de los valses populares consta de tres partes. En la tradición popular se puede encontrar el vals en muchos bailes y manifestaciones folklóricas, como el joropo y el tamunangue, entre otros, lo cual confirma que es un baile y un ritmo nacional.
Serenata Lejana
http://youtu.be/ixLWoZnOh0w
(autor: Luis Billo Frómeta)
http://youtu.be/ixLWoZnOh0w
(autor: Luis Billo Frómeta)
El piano
en el vals era protagónico, sobre todo en los llamados “valses de salón”, donde se desarrollaba un vals de dos partes,
estructura que sirvió de inspiración para guitarristas, como Antonio Lauro y sus famosos valses
adaptados a la guitarra.
La
estructura musical característica de los valses populares consta de tres
partes. En la tradición popular se puede encontrar el vals en muchos bailes y
manifestaciones folklóricas, como el joropo y el tamunangue, entre otros, lo
cual confirma que es un baile y un ritmo nacional.
Réquiem para el olvido:
Aun
cuando muchos músicos firman sus composiciones con sus nombres, la mayoría de
ellos ha dejado sus creaciones en el anonimato.
Esto es
un gran problema en un país como Venezuela que parece vivir a saltos de mata, es decir, brincándose largos
y cortos períodos de su historia, con lo cual ha convertido su pasado en una
colcha de retazos, donde pareciera no haber espacio para su pasado reciente, menos
aún el pasado lejano.
Venezuela
es un país de memoria muy frágil, más aun si se trata de sus más destacados
ciudadanos. Quizás sea por eso que desde su nacimiento como República sus más
selectos hijos han muerto lejos de su país. Sigue pasando así y se les reconocen
sus méritos más en el extranjero que en Venezuela.
El vals bailó con los grandes
compositores
Entre los
más destacados exponentes del vals venezolano figuran Antonio Lauro (Ciudad Bolívar, 3/8/1917-Caracas-18 4/1986), Manuel Enrique Pérez Díaz * (1911-1984), Rodrigo Riera (Cerca de Carora, 19/9/1923-Barquisimeto, 19/8/1999),
Alirio Díaz (12/11/1923, Caserío La
Candelaria, cerca de Carora, Lara) y Freddy
Reyna (Caracas, 3/4/1917-26/3/2001), representantes de generaciones
posteriores a Felipe Larrazábal (Caracas,
31/7/1816-frente a las costas europeas, 23/11/1873), Teresa Carreño (Caracas, 22/12/1853-Nueva York, EE.UU., 12/6/1917).
Ramón Delgado Palacios (Caracas, 1867-1902), Federico Villena, el enamorado del tono menor (Turmero,
estado Aragua, mayo 1835- Caracas, 17/7/1899), Ángel María Landaeta, José
Rafael Cisneros, la Escuela
Nacionalista (renacer guitarrístico) y Raúl
Borges (Caracas, 4/2/1882-24/6/1967), entre otros compositores del vals
venezolano. Valses famosos
“Adios a Ocumare” - Cantares Venezuelan Choir http://youtu.be/oQ2G1vujmV8
Dama Antañona- Francisco de Paula Aguirre
Dama Antañona- Francisco de Paula Aguirre
http://www.youtube.com/watch? =VdbRqDnppJo
Teresa Carreño-"El sueño del niño"
http://www.youtube.com/watch?v=a8D4s236_z4
Media Luna Andina-César Prato
http://www.youtube.com/watch?v=QtmeS9b4SqU
Referencias
* Manuel Enrique Pérez Díaz integró el Trío Los Cantores del Trópico, junto con Raúl Borges, Antonio Lauro y Marco Tulio Maristany. Este trío de alta factura musical realizó giras por toda América Latina. Pérez Díaz compuso las piezas para guitarra La Serenata, La Negra Espuma y Guasa. Dictó cátedra en la Escuela de Música José Ángel Lamas. Tuvo gran éxito como instrumentista.
@ElbaRomeroLopez
Deben actualizarse. No quedarse en un lindo pasado que es nuestro también, pero las nuevas generaciones tenemos el derecho de pertenecer esta historia musical venezolana. Habemos y me perdonan esa conjugación verbal, muy llanera por cierto, habemos muchos maestros de la presente generación musical, que no nos nombra ni Mandrake.
ResponderEliminarDel vals San José tan sonado, tan ejecutado es escandaloso que nadie escriba quien fué su autor. Pero cómo les gusta!!!
ResponderEliminarDel vals San José tan sonado, tan ejecutado es escandaloso que nadie escriba quien fué su autor. Pero cómo les gusta!!!
ResponderEliminar17/02/2016: Hasta hoy es cuando leo los comentarios del Sr. José Lecuna, que me permitiré contestar como sigue:
ResponderEliminarTiene razón cuando afirma que las nuevas generaciones tienen derecho a pertenecer a la historia, lo cual sucederá precisamente al escribirse el capítulo que corresponda a cada quien, de acuerdo a su obra. Recuerde que la historia nos narra el pasado, porque el presente lo narramos nosotros mismos.
Respecto al Vals SAN JOSE, es autoría del Trinitario-Maracucho Lionel Belasco quien también escribió LUNA DE MARACAIBO.